Las flores de Bach como terapias para perros

Las flores de Bach son unas infusiones preparadas a partir de la esencia de flores de plantas naturales. Constituyen un sistema de sanación desarrollado por el Dr. Edward Bach (un conocido bacteriólogo, médico y patólogo) a principios del siglo XX, entre los años 1926 y 1936.
Este sistema y la filosofía del mismo han dado lugar al desarrollo de la terapia floral.

Para que sirven

Cada una de las 38 Flores de Bach ayudan a equilibrar una característica o estado emocional negativo en particular.
Las Flores de Bach son una mezcla de agua, esencia de flores y brandy usadas para el tratamiento de trastornos emocionales y mentales y sirven para restablecer la armonía, para permitir que el cuerpo reaccione de manera creativa a los estados emocionales y para prevenir enfermedades físicas o el agravamiento de las mismas.
Las Flores se usan para tratar por ejemplo el miedo, la falta de confianza, la agresividad, la timidez, la ansiedad, la incertidumbre, la indecisión, el temor, la soledad, etc.

Flores de Bach para los perros

Las Flores de Bach pueden ayudar a los perros de la misma forma que pueden ayudar a las personas.
Los perros, al igual que los humanos, tienen sentimientos, personalidades y emociones.
Emociones como la depresion y la tristeza, el miedo y la soledad pueden afectar al comportamiento del perro y a su bienestar.
En la naturaleza los perros viven en perfecta armonía con el entorno y mantienen un equilibrio psíquico normalmente sano. Desafortunadamente la convivencia con el hombre transforma a menudo a los perros en esponjas del estado de animo de los propietarios hasta el punto que son particularmente sensibles y vulnerables a las emociones de sus amos.
Una manera eficaz de ayudar al bienestar emocional del perro es el uso de las esencias florales de Bach. Se trata de un sistema suave y sin contra indicaciones ya que en el peor de los casos no hará ningún daño al animal.

Los animales responden a las esencias florales más rápidamente que los seres humanos, ya que en ellos no existe ningún filtro racionalista.

Los animales no amplifican mentalmente las emociones como hacen los humanos, ni las relacionan con su propia historia,
los animales las viven en el momento, breve y plenamente.

La Organización Mundial de la Salud ha reconocido la eficacia de las Flores de Bach como medicina natural y tradicional, recomendando su uso junto con la medicina normal. Su finalidad es mejorar determinados estados de ánimo que pueden ser perjudiciales a largo plazo para la salud.
Estos estados de ánimo son el temor, la incertidumbre, la falta de interés, la soledad, la hipersensibilidad a factores externos, la desesperación o la preocupación excesiva por los demás. Las flores que se aplican en cada caso están especificadas, pero siempre debe consultarse a un veterinario especializado en la disciplina, para que escoja las más convenientes. Entre ellas puedes encontrar el nogal, el olivo, la rosa silvestre, la violeta de agua, el pino o la achicoria. Todas ellas puedes encontrarlas en herbolarios o parafarmacias.

La aplicación en los animales suele hacerse con una botella de 30 ml en los que se diluyen dos gotas de cada esencia necesaria, para mezclarlo con agua mineral. Con este compuesto se pueden aplicar cuatro gotas cuatro veces al día a tu mascota, o bien entre 10 y 20 gotas en su bebedero. Evidentemente, hay que escoger la mezcla adecuada, y esta terapia solamente es complementaria con otras. Además, cuando nuestro perro tiene un estado de ánimo negativo, muchas veces se trata del reflejo de nuestro propio estado, por lo que debemos tener esto en cuenta, por si somos nosotros mismos los que realmente necesitamos las Flores de Bach.